Uno de los objetivos de esta reforma ha sido ganar en amplitud visual y aumentar la luminosidad de la vivienda. Hemos eliminado la pared divisora entre cocina y salón creando un espacio de vida más amplio. Se ha subido también el techo original de la cocina con lo que hemos ganado además 15cm en altura lo que ha supuesto rehacer la instalación eléctrica y fontanería ubicada el el falso techo. La cocina lleva un cerramiento de cristal montado en estructura en hierro con acabado negro con dos aperturas, una hacia el salón y otra hacia el pasillo por lo que puede dejarse cerrada por completo para aislar de olores y ruidos o abierta para tener que el espacio no tenga barreras. En el mobiliario de la cocina se ha elegido un acabando blanco brillo para sensación de espejo que aporta más luz. La Iluminación, con focos de luz cálida y fría a tu elección, pueden alternarse según tus necesidades. La entrada original a la vivienda era pequeña y cerrada con una puerta al salón y al pasillo que era muy largo y sin luz natural, de esta manera tenemos luz natural al entrar en la casa y por el pasillo. Papel decorativo en el pasillo con ondas y tonos metálicos en el pasillo que da dinamismo y luz. También en la entrada decoración sencilla con un foco decorativo sobre papel de damasco. Hemos aprovechado todos los armarios existentes en la vivienda dándoles un acabado blanco acorde con el nuevo estilo lo que a supuesto un ahorro importante dentro de la reforma. Para mejorar la eficiencia energética se ha sustituido las ventanas por cerramientos de kommerling.